Un sistema fragmentado, politizado y poco resiliente
El sistema de salud dominicano enfrenta el enorme desafío de responder a las presiones de una población que envejece y a una carga de enfermedades crónicas, violencia y accidentes, mientras persisten las enfermedades infecciosas y materno-infantiles.
Lamentablemente, la respuesta se da desde un sistema fragmentado, segmentado, politizado y poco resiliente, con múltiples entidades operando sin integración y con una baja capacidad de liderazgo para conducir los cambios necesarios.
El Diagnóstico: Una Brecha Entre el Crecimiento y la Realidad
A pesar del sostenido crecimiento económico del país, los indicadores de salud revelan una profunda crisis de equidad:
- Baja Inversión: El gasto público en salud se mantiene por debajo del 3% del PIB, la mitad del 6% recomendado por la OMS.
- Alto Costo para la Gente: El gasto de bolsillo representa el 21.1% del gasto total en salud, una carga que golpea más fuerte a los hogares más pobres.
- Cobertura Injusta: Después de 18 años de la ley de Seguridad Social, un 25% de la población sigue sin afiliación, y los más desprotegidos son los del quintil de riqueza más bajo.
- Resultados Inaceptables: Las tasas de mortalidad materna e infantil siguen siendo de las más altas de la región.
- Mala Distribución: La mayoría de los médicos se concentran en las grandes ciudades, mientras que la disponibilidad de personal de enfermería (3.8 por 10,000 habitantes) es abismalmente inferior al promedio regional (50.6).
La Solución Propuesta: La Cobertura Universal y la Atención Primaria (APS)
La meta, respaldada por la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, es clara: lograr la cobertura universal de salud, donde todas las personas tengan acceso a servicios integrales y de calidad, sin que esto les cause dificultades financieras.
El camino más probado para lograrlo es un sistema de salud basado en la Atención Primaria de la Salud (APS). Sin embargo, en la República Dominicana, este concepto ha sido distorsionado y su implementación, fallida.
¿Por Qué Ha Fallado la Atención Primaria en RD?
A pesar de varios intentos desde la década de los 80, la APS no ha logrado consolidarse. Las razones son estructurales:
- Interpretación Errónea: Se ha confundido con una "mala atención para pobres" o programas periféricos.
- Predominio del Mercado: Las estructuras institucionales favorecen el negocio de la salud por encima de las instancias públicas.
- Visión Hospitalaria: El modelo sigue enfocado en lo curativo y hospitalario, en lugar de la promoción y prevención en la comunidad.
- Falta de Planificación: No se ha formado a los recursos humanos en una cultura de APS, y la baja jerarquización salarial genera desinterés.
No basta con incluir el término de Atención Primaria en Salud en la legislación, si no se rompen las estructuras institucionales proclives al predominio del mercado y de las empresas privadas del negocio de la salud...
Los Atributos Esenciales de una VERDADERA Atención Primaria
Un modelo de APS que funcione como soporte real del sistema de salud debe tener cuatro funciones esenciales y tres secundarias. Cualquier otra cosa es una atención primitiva.
Funciones Esenciales:
- Primer Contacto: Ser la puerta de entrada accesible al sistema.
- Continuidad: Ofrecer un cuidado a lo largo del tiempo.
- Coordinación: Integrar la atención entre diferentes niveles.
- Integralidad: Abordar todas las necesidades de salud (física, mental, social).
Funciones Secundarias:
- Enfoque Familiar.
- Orientación Comunitaria.
- Competencia Cultural.
Implementar una Atención Primaria con estos atributos no es una opción, sino el único camino viable para saldar la deuda histórica con el derecho a la salud en la República Dominicana.
Saludos,
Fundación Etikos